"Celebramos el nacimiento de Eugenio Garzón Furriol"

El 17 de abril de 1849, en la Provincia de Entre Ríos nace en un histórico hogar cargado de gloria y condecoraciones, Eugenio Garzón Furriol. Su padre era nada menos que Eugenio Garzón Avellaneda, aquel distinguido militar nacido en la ciudad de Montevideo el 6 de septiembre de 1796, figura clave en las luchas por la Independencia, afiliado al partido blanco, aliado de Lavalleja y Manuel Oribe. ''Organizador, pundonoroso y valiente, contribuyó a dejar bien sentada la reputación del soldado oriental en los territorios y pueblos que hoy forman las Repúblicas de Chile, Perú y Bolivia, habiendo antes militado con honor en los campos del Uruguay y en el interior de la República Argentina".

Su madre se llamó María de los Ángeles Furriol González-Luna, era hija de don Miguel Furriol Ferrer y doña Magdalena González-Luna Zaias, Marquesa de Montes Claros.

Sobrino materno de María Inés Furriol González-Luna, quien fuera mujer del distinguido Coronel Francisco Lasala y Oribe, militar de prolongada actuación al servicio de la parcialidad blanca -(hijo de aquel aristocrático matrimonio conformado por don Martín Lasala Fernández-Larrazábal y doña Margarita Oribe y Viana, por ende sobrino del Brigadier Gral. y Fundador del Partido Blanco, don Manuel Oribe y Viana), padres entre otros de Ángela Lasala Furriol, mujer del destacado Capitán Adolfo Areta Arrúe y de María Eusebia Lasala Furriol, casada con Juan Francisco Gowland de Acevedo, padres de Hortensia Virginia Gowland Lasala, unida en matrimonio a Alberto Arrúe Areta.

Del matrimonio Garzón Furriol, además del homónimo, nace Paulina Garzón Furriol, quien fiel a las costumbres clánicas del patriciado da su mano en matrimonio en 1852 a Juan Antonio del Rosario Garzón Durán, de la rama cordobesa, hijo de don Juan Antonio Garzón Míguez y doña Manuela Durán Decoud.

Sus abuelos paternos se llamaban Vicente Garzón López de Larrigada, de profesión Agrimensor de las obras reales de fortificación de la ciudad, casado en segundas nupcias el 20 de enero de 1778 con doña Antonia Avellaneda, perteneciente a una antigua familia de cuño hispano-criollo, descendiente directa del capitán Gaspar de Avellaneda Ruiz de Gaona, quien fuera Regidor Perpetuo y Alcalde de 1º voto del Cabildo de Buenos Aires, casado con Juana de Lavayen y Ponce de León, desgajada de los viejos linajes de los Ponce de León e Irala rioplatenses, cargado de conquistadores de América y personajes feudales. Testimonios coetáneos la describen a Antonia Avellaneda como una mujer de carácter firme. Ya anciana posa para Cayetano Gallino y el magistral pincel del retratista italiano deja en la tela una figura ataviada de mantón y peineta que trasluce en su expresión el ánimo inquebrantable de una mujer resulta y voluntariosa.

Por su parte, Eugenio Garzón Furriol, tuvo destacada actuación como legislador y periodista. Cuando contaba con 20 años se radicó en Buenos Aires y comenzó su actividad periodística en el diario "El Nacional". Al asumir en Uruguay la presidencia Julio Herrera y Obes, se muda a Montevideo donde estuvo al frente del diario "El Heraldo". Entre 1890 y 1894 cumplió funciones como Secretario de la Presidencia. Con el golpe de estado de Juan Lindolfo Cuestas se fue exiliado a Buenos Aires y luego a París donde escribió en el diario Le Figaró sobre temas de Latinoamérica, utilizando el seudónimo de El Reportado para publicar algunos de sus artículos y editoriales.

Cuando contaba con 20 años se radicó en Buenos Aires y comenzó su actividad periodística en el diario El Nacional. Al asumir en Uruguay la presidencia Julio Herrera y Obes, se muda a Montevideo donde estuvo al frente del diario El Heraldo. Entre 1890 y 1894 cumplió funciones como Secretario de la Presidencia. Con el golpe de estado de Juan Lindolfo Cuestas se fue exiliado a Buenos Aires y luego a París donde escribió en el diario Le Figaró sobre temas de Latinoamérica, utilizando el seudónimo de El Reportado para publicar algunos de sus artículos y editoriales.